Tres Lunares

Tres lunares

Kerigma

Era su sililueta cada noche en la ventana,

y la fantasía convertida en realidad,

en la ceremonia antes de dormir

se preparaba, algo de gimnasia

para estar en  vaya forma,

luego la pijama terminaba en show,

solo algunas veces mi conciencia me pegaba,

aquello ya era una adicción.

Nunca pude hablarle

cuando estuve cerca

y saber su nombre era mi ambición,

y hoy que se ha marchado

vivo  prisionero de aquella angelical  visión.

Nunca estuviste conmigo,

y tus tres lunares de memoria sé,

el de tu rodilla, el de tu mejilla,

y el el que solo yo podia morder

hasta con los ojos cerrados,

esos tres lunares podría yo encontrar,

el de tu rodilla, el de tu mejilla

y el que solo yo podía devorar.

Deja un comentario